La acupuntura es un método terapéutico que mediante la inserción de agujas en puntos estratégicos mejora o cura distintas patologías.
Otra forma de trabajar con los puntos de acupuntura es estimulándolos con calor (MOXA) que puede presentarse en forma de carbón o de la propia planta prensada, la diferencia entre los dos tipos es únicamente que la moxa en carbón apena produce humo y en la planta prensada produce mucho y solo se aplica al aire libre o sitios muy ventilados.
El diagnóstico en acupuntura es la parte más importante del tratamiento para poder diferenciar cuáles son los puntos adecuados sobre los que trabajar y cómo trabajar con ellos para corregir la disfunción o problema que presente el paciente, se lleva a cabo con diferentes técnicas como un interrogatorio minucioso, observación del paciente y algunos signos que dan al terapeuta las pautas a seguir.
Cada paciente tiene un tratamiento diferente según lo que determine el terapeuta y normalmente aunque dos pacientes vengan con la misma sintomatología el tratamiento suele ser diferente y personalizado puesto que la acupuntura trabaja sobre la base del problema y no sobre los síntomas que este produce.
La punción de la agujas molesta un poco, sobre todo en el momento de la inserción en la piel pero una vez puestas apenas se notan, son unas agujas muy muy finas, de hecho al retirarlas normalmente nunca se produce sangrado .
Son agujas desechables de un único uso, después década uso al retirar las agujas las tiramos a un contenedor específico para ello y son destruidas.
La acupuntura es una disciplina de las ciencias de la salud reconocida por la O.M.S (Organización Mundial de la Salud) desde 1979 cuando reconoció la eficacia y seguridad del método.
En muchos países es reconocida oficialmente como especialidad médica, como en Brasil, Colombia, Chile, Cuba, Estados Unidos, México y Canadá. En Europa en Reino Unido, Alemania, Francia y en España en algunas regiones ya se aplica dentro de la seguridad social por ejemplo en Andalucía, Cataluña, Madrid siempre con consentimiento previo del paciente.
Existen pruebas empíricas y científicas que avalan los beneficios de la acupuntura. Por ejemplo, la eficacia de la acupuntura para aliviar el dolor, ha sido demostrada en numerosos ensayos clínicos. Por ello en Reino Unido el 90% y el 70% en Alemania de los servicios de tratamiento del dolor la utilizan.
La acupuntura como cualquier técnica médica puede ser peligrosa o lesiva si no es realizada por un profesional cualificado.